Capitulo 2: El libro de Zero.

Parte 2:

—Bueno… de todas formas, ¿Qué clase de libro es ese que dices que puede destruir el mundo?

Zero se las arregló para apartar la mirada de la carne dorada y me miró, formando una sonrisa presuntuosa.

—Fue escrito en tinta imperecedera, en un pergamino perfumado con el mejor incienso. Estaba encuadernado con ébano pulido hasta tal punto que podías ver tu propio reflejo en él, con bisagras de oro y embellecido con detalles insuperables. Después de darle un solo vistazo-

—¡No pregunté por su aspecto! ¡Me refiero a lo que tiene escrito!

No, la apariencia del libro podría ser útil ya que lo estamos buscando, pero eso no era lo que quería oír. La expresión de Zero se volvió amarga.  

—Realmente es un libro magnífico —Murmuró mientras se quejaba. —No creo que seas capaz de entender nada de lo que pone ni aunque te lo explicase…

—Si no puedes hacer que sea entendible, entonces seguramente sea una explicación de tercera categoría.

Zero se me quedó mirando fijamente en silencio. Yo hice lo mismo con ella. Nos quedamos mirándonos el uno al otro, brevemente–

—¿Cuánto sabes acerca del estudio de la hechicería? —Pregunto ella repentinamente. Parecía que yo había ganado el concurso de miradas.

—No se nada sobre los detalles y todo eso, pero… es sobre convocar demonios y hacer cosas místicas, ¿No?

—Si, lo que dices es correcto. ¿Pero sabes de que manera?

—Dibujando círculos de invocación, recitando hechizos y realizando sacrificios. —Respondí sin indecisión, y Zero asintió satisfecha.

—Correcto otra vez. Negociamos con el demonio invocado para realizar hazañas sobrenaturales. Esencialmente eso es la hechicería.

Incluso para la gente ajena a la brujería, eso era de conocimiento público, podías encontrarlo desde el sermón de la iglesia hasta en libros para niños. Eso se debía al papel de las brujas como villanos en la cultura actual.

—Ahora, acerca de las flechas de luz que te atacaron la anterior noche, las llamé ‘Staim’. ¿Qué piensas de ellas después de haberlas visto?

Me encontraba un poco confundido. Zero se rió cuando me mantuve en silencio .

—No es necesario pensarlo demasiado. Estabas aturdido, ¿Verdad?

—Ah, esto… hmm… si.

—Los humanos estarían aturdido, mercenario, porque es algo completamente inesperado. Puesto que subconscientemente creen que algo como eso es imposible.

Por supuesto, las "flechas de luz" que la bruja enemiga había usado y la "caja de tierra" que Zero había creado, habían hecho que me replanteara lo que sabía de la brujería. No recordaba haber visto a la bruja dibujar círculos de invocación mientras caminaba, y tampoco ofrecer sacrificios. Naturalmente, tampoco vi ningún demonio. Había oído rumores de que las brujas de Vanias habían comenzado recientemente a usar métodos de naturaleza desconocida, pero lo que había visto demostraba ir más allá de mi imaginación.

—¿Entonces mi sentido común esta equivocado?

—Es lo contrario, simplemente engañaron a tu sentido común. Estrictamente hablando, ‘Staim’ no es un hechizo.

—¿No… no es un hechizo?

‘¿Entonces que diablos es?’ Antes de que pudiera decir una palabra, Zero contesto a mi pregunta.

—Si, no es un hechizo, es magia.

—¿Ma… jia…? ¿Pero qué-?

Repetí esa palabra que no conocía, pero decir una y otra vez no me revelaba su significado. Zero no se contuvo y soltó una gran carcajada. ¿De verdad estoy poniendo una cara tan rara?

—¡¿De qué demonios te estás riendo?!

—Oh– es solo que, para ser un fiero y violento mercenario, estas mostrando una expresión muy linda justo ahora.

—¡¿L–lindo-?! ¡…Me llamas a mi– !

—No te avergüences, mercenario, solo logras parecer más mono todavía. Apenas puedo contener mis ganas de achucharte.

Para un mercenario como yo, el ser arrestado y llamado lindo eran grandes ofensas.

Para calmar mi descontento, esparcí unas hierbas secas trituradas y sal sobre la carne, que había comenzado a emitir un olor apetitoso. El fuego chisporroteaba y las chispas amarillentas caían como si fueran sal.

 —Aunque esto no te concierna, seguiré con la explicación. Además, podría manchar el nombre de la ‘bruja de la tierra y la oscuridad’ por ser considerada una bruja de "tercera categoría". Pero antes de entran en detalles sobre la magia, tengo que compartir contigo un conocimiento preliminar. Me refiero al entendimiento de lo que es la hechicería, claro está. Si ni entiendes como funciona, no seré capaz de aclararte nada acerca de la magia.

Zero recogió una rama caída de algún árbol y empezó a grabar símbolos extraños en la tierra. Después de terminar un glifo pasaba al siguiente- hasta que delante mío se apreciaba un círculo formado por muchas, muchas marcas.

—¿–Un círculo de invocación?

—Correcto. Para invocar a un demonio es necesario un circulo de invocación. Las brujas los consideran como tierra sagrada. Tiene la cualidad de amplificar el poder de los espíritus, y es esencial para proteger a las brujas de los demonios a los que han invocado.

Zero circunscribió el anillo de glifos con una sola línea circular. Era tan perfecta que no había manera de que un humano pudiera haberlo dibujado con una ramita. Había cuatro círculos más pequeños dentro del círculo exterior, uniformemente espaciados unos de otros, llenos de minúsculas letras y símbolos que no podía entender.

—¿Protegerse de los demonios? ¿Los demonios las atacan o algo?

—Apartando lo de ser atacadas, si hay alguna clase de error o imperfección en el círculo de invocación, los demonios acabarían devorando a la bruja. Por eso, lo primero en perfeccionarse es el arte del dibujo y la escritura. Círculos perfectos, líneas perfectas, caligrafía perfecta. Si no puedes dominar esas técnicas, es imposible convertirte en una auténtica bruja.

—¿Pero eso no es muy peligroso?”

—Si… el invocar a un demonio siempre es peligroso. —Declaró Zero terminando el círculo.

No me digas que ella pretende usarlo… Pensando eso mire a Zero con miedo.

—¡Espera! No es posible… ¡¿Vas a convocar a un demonio?!

—Así es, tan solo observa. Estoy segura de que lo encontrarás bastante interesante.

Ignorando mis súplicas de detenerse, Zero extendió sus manos y comenzó a murmurar, cantando un hechizo. Yo quería detenerla, pero al mismo tiempo tenía miedo de estropear el hechizo de alguna manera y provocar que algo malo sucediera. Me preparé para escapar al instante. Sin embargo, no pude reunir el coraje para correr, así que me quedé temblando de miedo, alternando la mirada entre Zero y el círculo de invocación.

- - Después de transcurrir cinco minutos, Zero seguía de pie en el mismo sitio, recitando el mismo hechizo.

Ya me estaba cansando de mi puesto de vigilante. ¿Va a pasar algo a este ritmo? Al momento que pensé aquello, el circulo comenzó a brillar. Era una pálida luz azul. Algo apareció.

¡–Mierda, esta aquí! ¡¿Qué diablos será…?! Me aleje de un salto con todas mis fuerzas.

Un instante después la luz se desvaneció, me quedé mirando la cosa que invocó Zero.

Tenía un cuerpo similar al de un humano, pero definitivamente no era un humano. También tenía unos profundos ojos de color esmeralda, sin nada de ropa puesta, únicamente unas alas similares a la de un insecto que salían de su espalda. Y- era sorprendentemente pequeño.

Esa cosa parece más pequeña que la palma de mi mano.

—¿Esto… es un demonio?

—Si, es un demonio. Pero… ¿No estás demasiado asustado de él?

—¡Cállate! ¡No hay ningún humano que no se asustaría de los demonios!

Me mantuve lo más lejos posible, pero aún así, tenía la cola con los pelos de punta. Zero se asombró de mi reacción.

—Ven, acercaré a verlo, es totalmente seguro. No muerde. De hecho, técnicamente es un hada, pese a que lo llamen demonio.

—Bien, debe de haber diferencias entre las hadas y los demonios.

—No son diferentes. En esencia son lo mismo. El nombre que se les da depende del momento y lugar donde se los encuentre, pero las brujas denominamos a todas las criaturas inhumanas con el término genérico de demonio. Esto se aplica tanto a las hadas como a los espíritus— y por supuesto que también a los dioses.

Estaba en estado de shock.

—¿No es un error agrupar a los dioses junto a los demonios?”

—La iglesia no hace distinción entre los dioses paganos y los demonios. Dicho de otra forma, incluso la iglesia admite que la percepción pública de que su dios es diferente a los demonios, es simplemente un mal entendimiento causado por su fe.

Tranquilamente acepte esta nueva revelación. De todas formas, yo no veneraba a ninguna deidad, así que para mi su explicación era mucho más creíble que esa única verdad de Dios.

Me dirigí hacia el círculo de invocación y miré al minúsculo y claramente nervioso demonio. Hacia un ruido de bzzt bzzt, como el zumbido de los insectos.

—¿…Este pequeño esta asustado?

—Eso parece. Demonios de bajo rango como este nunca suelen ser invocados, así que no estará acostumbrado.

—¿Entonces los demonios están divididos en rangos?

—Así es. En el mundo de los demonios hay una estricta jerarquía. Los de mayor rango poseen un gran poder y tienen a los de menor rango como sus esclavos. Entonces, si logras invocar a un demonio de alto rango, este te podrá enseñar el procedimiento para llamar a los de bajo rango que tiene sometidos. Así, el estudio de la hechicería ha florecido y crecido como la rama de un árbol gigante.